Del 23 de julio al 8 de agosto, se llevarán a cabo, sin espectadores, los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Tokio 2020, los cuales fueron aplazados un año por la epidemia global de coronavirus. Desde entonces, el padre Marco Antonio Martínez Franco, misionero de Guadalupe en Japón, se encuentra listo para recibir a los atletas.
En el 2019, el P. Marco Antonio recibió por parte del Sr. Tarsicio Kikuchi Isao, Arzobispo de la Arquidiócesis de Tokio, Miembro de los Misioneros del Verbo Divino, el encargo de coordinar un comité pastoral para las Olimpiadas de Tokio 2020, con el objetivo de acoger espiritualmente a los deportistas durante su estancia.
Esta es una responsabilidad que el padre Martínez Franco, a sus 80 años, lleva con gran alegría y que ha sacado adelante con el apoyo de un equipo compuesto por sacerdotes, religiosas y feligreses de varias parroquias. En el transcurso han tenido bastantes reuniones entre ellos y con coordinadores de otras religiones.
Ante la suspensión del evento en 2020, el P. Marco no quiso dejar en el olvido todos los esfuerzos realizados hasta el momento y prosiguió con la celebración de un Rosario misionero que se tenía programado para el siguiente día después de la apertura de las Olimpiadas. Al respecto, nos compartió el siguiente testimonio:
“El Sr. Arzobispo, como misionero que es, aceptó de buen agrado, así que volví a llamar a los miembros del grupo de voluntarios y preparamos el Rosario, que fue presidido por él, ya no con la festividad antes pensada, sino, en un ambiente de silencio y oración para pedir a Dios por el sufrimiento a causa de esta pandemia que estamos viviendo. El único canto que hubo fue el Ave María de Schubert y al final proyectamos un video con una imagen del mundo, con el cual oramos, alumbrados por una pequeña luz de las velas que encendimos por los cinco continentes.”
El rezo de este Rosario fue celebrado el sábado 25 de Julio de 2020, en la Parroquia de San Ignacio, una de las más grandes de la ciudad y la cual se encuentra dentro de la Universidad Sofía, administrada por los jesuitas, muy cerca de la estación Yotsuya. Al lugar asistieron alrededor de 45 feligreses, quienes participaron de acuerdo a las normas sanitarias del gobierno japonés.
Los Juegos Olímpicos se celebrarán este 2021 sin la presencia de espectadores, ya que el gobierno japonés ha declarado un nuevo estado emergencia, debido al aumento de contagios de Covid-19. La medida entrará en vigor el 12 de julio y se extenderá hasta el 22 de agosto. Sin embargo, se podrían aligerar las restricciones si la situación mejora.
Los Misioneros de Guadalupe nos unimos en oración por todos los competidores que asistirán a este gran eventoy rezamos para que todos los contagiados por Covid-19 encuentren la recuperación deseada. Pedimos por todos los que han cuidado de los enfermos y, especialmente, por quienes han fallecido por esta causa, para que encentren el descanso eterno.
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