Por el uso de las nuevas tecnologías
¿Las nuevas tecnologías son buenas y útiles? El P. Juan José Márquez Echeverría, MG, desde la Misión de Corea del Sur, nos comparte una reflexión referente al buen uso de las nuevas tecnologías.
Abril 3, 2025

Autor: P. Juan José Márquez Echeverría, MG
En abril, el Papa Francisco nos suplica, como intención de nuestra oración, pedir a Dios por el “uso de las nuevas tecnologías”. La humanidad, en su caminar, ha progresado en muchos aspectos y uno de ellos es, sin duda, el área de la tecnología, que nos ayuda a realizar de manera mejor y más eficiente nuestras tareas.
Tenemos muy presente que la labor principal de la Iglesia es llevar el Evangelio a todas las creaturas, como nos lo pide Jesús antes de ascender a los cielos: “Id por todo el mundo y anunciad el Evangelio” y por lo mismo, la Iglesia realiza esta misión desde el tiempo de los apóstoles con los mejores medios con los que cuenta para ello, es decir, con las nuevas y mejores tecnologías de su tiempo. En la época de los apóstoles, estas tecnologías eran la retórica y las cartas, como encontramos en el Nuevo Testamento; posteriormente, evolucionaron con los libros, la radio y la televisión.
En la actualidad, estas nuevas tecnologías se refieren al internet como medio de comunicación, con las páginas web y las redes sociales, como Facebook, Instagram, Whatsapp, Telegram, etcétera. Asimismo, hoy se habla de la inteligencia artificial como un elemento que sugiere un nuevo modo de conocer y de comunicarnos. Con estas nuevas tecnologías ha sido posible comunicar el Evangelio a un mayor número de personas en el mundo y llegar incluso a lugares en donde la fe está restringida o más aún, prohibida (Corea del norte, países musulmanes, etcétera). De igual manera, se ha podido realizar esta tarea evangelizadora incluso cuando no era posible moverse libremente por la calle y viajar a otros lugares o países, como fue durante la pandemia del Covid-19. Quizás podríamos afirmar que, debido a esa pandemia, la Iglesia adoptó de una manera más generalizada y positiva el uso de las redes sociales para transmitir ceremonias y mensajes religiosos cuando más se necesitaba llevar al pueblo de Dios y a la gente en general un mensaje de fe y esperanza.
Como podemos ver, las nuevas tecnologías son una herramienta muy positiva y eficaz para llevar la Buena Noticia a muchas personas. Sin embargo, no todo es positivo, ya que, por estas mismas herramientas, se transmiten mensajes de desinformación, de difamación e incluso de odio, que van en detrimento y son un obstáculo para la evangelización.
Es necesario ser muy cuidadosos y aprender a descubrir (discernir) lo bueno y lo malo de lo que se transmite a través de las redes sociales.
El Papa Francisco, en su mensaje por la Jornada de las Comunicaciones Sociales, nos advierte acerca de ello: “Según la orientación del corazón, todo lo que está en manos del hombre se convierte en una oportunidad o en un peligro. Su propio cuerpo, creado para ser un lugar de comunicación y comunión, puede convertirse en un medio de agresión. Del mismo modo, toda extensión técnica del hombre puede ser un instrumento de servicio amoroso o de dominación hostil”. Con respecto a la inteligencia artificial, añade: “Los sistemas de inteligencia artificial pueden contribuir al proceso de liberación de la ignorancia y facilitar el intercambio de información entre pueblos y generaciones diferentes”; es decir, tiene sus aspectos positivos, pero no hay que olvidar la otra cara de la moneda; el Papa añade: “Pero al mismo tiempo pueden ser instrumentos de ‘contaminación cognitiva’, de alteración de la realidad a través de narrativas parcial o totalmente falsas que se creen –y se comparten– como si fueran verdaderas. Baste pensar en el problema de la desinformación al que nos enfrentamos desde hace años en forma de fake news y que hoy se sirve de deepfakes, es decir, de la creación y difusión de imágenes que parecen perfectamente verosímiles, pero que son falsas (también yo he sido objeto de ello), o de mensajes de audio que utilizan la voz de una persona para decir cosas que nunca ha dicho. La simulación, que está en la base de estos programas, puede ser útil en algunos campos específicos, pero se vuelve perversa cuando distorsiona la relación con los demás y la realidad” (mensaje del Santo Padre Francisco para la 58 Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales). Así pues, es necesario pedir a Dios por el buen uso de las nuevas tecnologías y, al mismo tiempo, estar atentos a distinguir lo verdadero de lo falso, lo que nos ayuda a crecer en la fe o lo que nos destruye, incluso como personas.
Usted puede contribuir con las Misiones, ¡únase a esta obra de evangelización! Contáctenos: Línea Misionera 800 00 58 100, de lunes a viernes, de 8:30 a 18:00 horas, tiempo del centro.
Te podría interesar