En 1991 Mons. Francisco João Silota, Obispo de la entonces recién formada Diócesis de Chimoio, en Mozambique, solicita formalmente la colaboración de Misioneros de Guadalupe en su diócesis.
Más tarde, en agosto de 1999, el Mons. Francisco, en visita a Kenya, invita a los padres a conocer dos distritos de su diócesis, que están completamente abandonados y de primera evangelización.
Finalmente, el 9 de octubre del año 2000 llegaron a Mozambique los tres primeros padres Misioneros de Guadalupe para trabajar en la Diócesis de Chimoio: PP. Antonio Estrada, Enrique Hernández y Antonio García. Ese mismo día llegaron al Centro Polivalente de Marera, en donde estudiaron la lengua chimanica por tres meses, mientras salían con el obispo a conocer diferentes comunidades de la diócesis.
En ese entonces, Mozambique era (y continúa siendo) uno de los países más pobres del mundo. En el inicio del año 2000, además de sufrir las consecuencias de las guerrillas, como la pobreza y el hambre, se presentaron desastres naturales causados por lluvias y ciclones, que dejaron a la población en fuertes desventajas; así mismo, otro flagelo al que se enfrentan de manera constante es el SIDA, que limita de manera dramática la esperanza de vida en estas comunidades africanas.
Desde su llegada, nuestros sacerdotes Misioneros de Guadalupe han apoyado a la Iglesia local con la atención de parroquias, la formación permanente de catequistas y la formación del Seminario Menor de la Diócesis de Chimoio.
Además, es una de las Misiones donde se cuenta con la ayuda de los Misioneros Laicos Asociados, a quienes se les han encomendado el apoyo a la educación, a través del Centro de Formación de Agentes de Evangelización, la Escuela Comunitaria San Juan Pablo II y el Internado Femenino del Centro de Chikewia.
Actualmente, Misioneros de Guadalupe en Mozambique continúa brindando abundantes frutos en tareas de evangelización, tenemos presencia en el Seminario San Carlos Lwanga y en las parroquias de Cristo Rey en Jecua, San Antonio en Machipanda y en San Antonio, Guro, en la Diócesis de Chimoio.
Celebramos y damos gracias a Dios por los 21 años de entrega y servicio de Misioneros de Guadalupe y de los Misioneros Laicos Asociados en la Misión de Mozambique y oramos para que, bajo la guía de Santa María de Guadalupe, sean muchos más, con el apoyo de nuestros bienhechores.
¡Ayúdanos a que la Misión siga creciendo! Con tu donativo y oraciones haces posible que llegue la Palabra de Dios donde más se necesita. Contáctanos para conocer más de esta labor, Línea Misionera (sin costo) 800 00 58 100
